¡Hola lectores! Primera reseña del 2020 en el blog, no puedo creer que ya sea 4 de enero qué rápido. En esta ocasión les traigo la opinión de un libro que terminé en diciembre y que amé. "En nombre del amor" de Nicholas Sparks es un romance que me cautivó. Espero que disfruten la reseña y se animen a leerlo, acá vamos...

"Travis Parker tiene todo lo que un hombre pueda desear: un buen trabajo como veterinario, amigos fieles e, incluso, una casa delante de un lago en una pequeña localidad de Carolina del Norte. Le gusta la vida y aprovecharla al máximo, aunque hay algo que se resiste a probar: enamorarse. Pero semejante propósito desaparece por completo en el momento que conoce a Gabby Holland.
Gabby es una asistente pediátrica que se acaba de mudar al barrio de Travis. Él intenta se un buen vecino, invitarla a sus reuniones y a pasar el día con amigos en su lancha, pero ella elude cada uno de los avances de su encantador vecino, en parte porque le sería demasiado fácil sentirse atraída por él. Y eso le traería problemas porque Gabby tiene novio."

Gabby Holland es la protagonista, es asistente pediátrica y se acaba de mudar a un nuevo barrio en una localidad de Carolina del Norte, no conoce a nadie, salvo a sus compañeros de su nuevo trabajo. Gabby está acompañada por Molly, su perrita y ella es el motivo que provoca que su vida se cruce con la de Travis Parker. Travis es veterinario y el vecino de Gabby, y aunque este hombre es un ser libre, no puede negar que la presencia de Gabby lo atrae y lo hace sentir diferente. Y es el hecho de que esta mujer es diferente a cualquiera que él haya conocido. 

Desde ese momento ambos personajes empiezan a cambiar completamente, Gabby tiene un novio al que ama pero la libertad que ella cree tener en la relación no es tan así, y se da cuenta de que se siente viva cuando pasa tiempo con Travis y sus amigos, pero ¿se animará a expresar lo que realmente siente? ¿Se dejará llevar por el destino? Porque hay que ser realistas, el amor llega cuando llega, uno no logra controlar lo que siente por alguien, y estas son las dudas que no la dejan dormir. Por su parte, Travis está confundido, nunca se sintió ¿enamorado? Él dice que no, pero su hermana, que por cierto amé profundamente, cree que sí. La hermana de Travis, Stephanie, es todo un personaje, me reí muchísimo con sus disparates y por el modo que tiene de vivir la vida y ella es un apoyo fundamental en la vida de su hermano.

Me fascinó como el escritor pone los conflictos personales de cada uno, cómo se preguntan lo que sienten y cómo quieren vivir la vida. El desarrollo de cada uno es hermoso. Los giros de la trama son maravillosos, y se debe a que la novela empieza con un prólogo en febrero del 2007 y luego pasa a contar en mayo de 1996, ¿qué habrá pasado en esos 10 años? Increíble y emotiva. Un romance que recomiendo, se puede leer en muy pocos días ya que es ligero y adictivo.